viernes, 30 de octubre de 2015

14 de Sahagún a El Burgo Ranero. Empezamos en el Gran Francés



Dia 15 Abril

1er dia del Camino Francés

Me levanto temprano, y desayuno en el albergue, por fin estoy con gente desayunando a la vez que yo!, pero son alemanes y no dicen nada, se limitan a un saludo con un gesto, así que sigo a mi marcha, cuando echamos a andar tocan las campanas de las 8, como todos los días.


Está nublado, pero la mañana es agradable. Tenemos que cruzar todo el pueblo que recorrí ya ayer turisteando, y salimos por el puente medieval que cruza el río Cea.


Creyendo que íbamos a tener que ir 5 km por carretera, me llevo la buena sorpresa de que vamos por camino, paralelo a la carretera, pero camino!

El denominado Real Camino Francés, es un sendero de gravilla recto hasta donde alcanza la vista, con una carretera a un lado, y en el otro una hilera de arbolitos con las ramas peladas. A la vista extensas parcelas de tierra plana: El Páramo.





A la hora y media de marcha empieza a chispear, bueno, es poquito y hasta es agradable. Paso por Bercianos sin parar, un pueblo triste de casas pobres, de tapias de ladrillo común mezclado con adobe, que parece abandonado a su suerte, tan triste y tan abandonado, que es inevitable que vuelva a llover, el cielo llora de pena!


El Burgo Ranero nos recibe igual de triste y vacío que Bercianos, me acerco a la iglesia y está cerrada, aunque el horario dice que debería estar abierta, busco el albergue y también está cerrado, me dicen que pase a partir de las 13.30 que ahora están limpiándolo, los hospitaleros andan un poco despistados, es una pareja de guiris, mayores y me dicen que es su primera semana. que luego me enseñarán un cuarto en el que puedo pasar la noche con la Lisa, no me dejan ni meter la mochila, así que busco algún sitio para resguardarnos, pues la lluvia arrecia.

Enfrente hay un hostal restaurante, el nombre me suena que llamé ayer y me dijeron que no admitían perros, así que no voy ahí, al lado veo una terraza con toldos, allí me puedo tomar algo, mientras espero.


Son alrededor de las 12.00, y llega una mujer, que le ha pasado lo mismo y se dispone a esperar también hasta que abran. Es española, estamos charlando viene un cura, nos pregunta si somos peregrinas, y al decirle que sí, nos echa una bendición, nos da un papelito con una oración y se va tan ancho.



La lluvia continúa y hace fresco, así que me decido a preguntar al dueño del bar que también tiene habitaciones, si me deja dormir con la perrilla y dice que sí, que se la ve muy buena y que no hay problema.

Es la pensión El peregrino, 30€ con desayuno, es muy sencilla, pero tiene calefacción y está muy limpia.

Poco tengo que contar de esta etapa, sólo que ha sido el primer día lloviendo, que la Lisa ha perdido la medallita que le compré ayer, y en la que me ha dado la sensación de que los peregrinos empiezan a ser Money.








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