Caminaremos hasta el instante
en que en la lluvia crezca la libertad:
sobre los campos, sobre los tejados,
sobre la esperanza y la soledad.
Sobre los espantos, sobre las nostalgias,
sobre los espacios,
crezca de verdad.
Caminaremos hasta la aurora
en que en el viento renazca la igualdad:
entre los hombres, entre las palabras,
entre los gestos, entre cada cual.
Entre las manos, entre los rostros,
entre los labios,
renazca de verdad.
Caminaremos hasta el momento
en que las manos sean fraternidad:
de pueblo a pueblo, de isla a isla,
de casa a casa, de ciudad a ciudad.
De viejo a joven, de amor a amante,
de padre a hijo,
sea de verdad.
Caminaremos hasta el instante
en que la lluvia crezca la libertad.
Caminaremos hasta la aurora
en que en el viento renazca la igualdad.
Caminaremos hasta el momento
en que las manos sean fraternidad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario